martes, 4 de noviembre de 2008

Los primeros en mover ficha

No ha transcurrido ni un mes de competición y ya tenemos el primer gran traspaso de la temporada. Allen Iverson viaja a Detroit, mientras que Chauncey Billups y Antonio McDyess han hecho las maletas rumbo a Denver. Mucho se está especulando, como siempre en estos casos, acerca de la conveniencia del cambio de cromos. En los Nuggets se han querido quitar de encima el costoso contrato de Iverson, que no les ha reportado los éxitos deportivos esperados. Es el segundo movimiento en esa línea después de haber regalado a Camby a los Clippers hace unos meses. Billups y McDyess le confieren un empaque a su quinteto, sumando experiencia y saber hacer en la lucha por el título. El impacto será inmediato, aunque está por ver si McDyess llegará a ser un "nugget" en esas fechas. Se viene comentando en los mentideros que le comprarán el contrato y harán hueco para su ficha de cara a un futuro no muy lejano. Es exactamente lo mismo que puede suceder con Marbury en los Knicks, pero por razones radicalmente diferentes. En New York arden en deseos de embalar al bueno de Stephon en una caja para enviarlo lo más lejos posible. McDyess presenta unas credenciales fuera de toda duda, y puede ser el complemento perfecto para el "resucitado" Andersen en el poste. Solvencia y profesionalidad para el equipo de Colorado.

Los Pistons se hayan inmersos en una nebulosa. Acaban de renovar a Richard Hamilton , con lo que se aseguran la permanencia de una de sus principales figuras. Sin embargo, perderán más pronto que tarde a Rasheed Wallace, que está en la recta final de su carrera y un poco cansado del baloncesto de alto nivel.

La reconstrucción en la NBA se hace de dos maneras: moviendo peones o comprando un nuevo tablero. La segunda opción es la aconsejable para equipos con acreditada trayectoria descendente, y la primera se aconseja para equipos como Denver o Detroit, que no quieren prescindir de su oportunidad de conseguir algo esta temporada. Iverson seguro que gana con el cambio, en motivación y en protagonismo. Un cambio bueno para los dos equipos. Si Amir Johnson y Jason Maxiell responden, los Pistons ganarán muchos enteros. Está por ver si están preparados para el reto que se les presenta.

lunes, 3 de noviembre de 2008

¿Vuelven los Knicks?


Las aguas bajan revueltas en New York, y parece que no hay figura humana o extraterrestre que pueda arreglar el desaguisado. El desconcierto colectivo con una cúpula rectora sin cabeza ha transformado una franquicia históricamente ganadora y exitosa en un montaje escénico más propio del Circo del Sol. Jugadores descastados y estrellas multimillonarias fuera de forma se mezclan en un "roster" difícilmente explicable. Los gastos en contratos disparan el presupuesto a unos límites incontrolables, incluído el sueldo del retirado Allan Houston. Tampoco ha ayudado la gestión de Isiah Thomas, tan magnífico jugador como desastroso gestor.

Lo peor de todo es que detrás hay una ciudad que apoya al equipo, y que permite todos los excesos mirando a otro lado. Para retomar la senda correcta han contratado a Donnie Walsh, que tratará desde los despachos de darle un poco de cordura a la oficina de los Knicks, donde seguro que tienen desordenados hasta los archivadores. En el banquillo está Mike D´Antoni, el artífice del juego preciosista y ofensivo de los Suns, y que intenta a su manera darle al juego de New York un toque de fluidez y dinamismo. La tarea no va a ser fácil, y no le van a poner una alfombra roja. Ya ha sido pillado en falta. Cuando pensaba que las miradas y los focos iban a permanecer centrados en otro lugar, han salido de su boca palabras muy feas sobre la afición. Se sabe que el público es soberano, incluso el de los Knicks, lleno de contradicciones en sus gustos, pero la actitud de D´Antoni invita por lo menos a la reflexión. Sabía la arena que iba pisar, movediza y en la que las huellas se borran con facilidad, por lo que al menos al principio debería caminar con cuidado. Soy el primero que le desea lo mejor, porque significaría que la franquicia volvería a la élite, pero también soy algo escéptico. Hay que tener en cuenta que tampoco ha podido configurar el equipo deseado, y que ha tenido que "tragar" con lo que se encontró. Si consigue la mitad de sus propósitos, creo que podrá llevar a los Knicks cerca del Playoff.

domingo, 2 de noviembre de 2008

El genio solitario


Al tirador clásico le gusta reclamar el balón con premura, exigir un bloqueo y armar el brazo. Así le gustaba a Drazen Petrovic, cuya carrera en la NBA estuvo llena de dificultades en sus inicios. La falta de minutos condujo al genio de Sibenik a una desesperación que casi le hizo abandonar su aventura americana. Curiosamente en el mismo equipo que ahora ve con lupa los progresos de Sergio Rodríguez y sobre todo, de Rudy Fernández . Adelman nunca confió en Petrovic, la misma premisa que cumple McMillan con Sergio. Sin embargo, Rudy se está convirtiendo en un falso sexto hombre en los Blazers. Pide el balón, exige el bloqueo y arma el brazo. Tiene experiencia en el viejo continente y ha gastado mucha suela de zapatilla en canchas de Barcelona, Madrid, Sevilla, Estambul, Belgrado o Atenas. Eso se nota, y mucho. No es muy común que un novato extranjero juegue más de 30 minutos en sus primeros choques, pero éste es un caso especial. Esperan mucho de Rudy, y en el departamento de márketing de la franquicia de Oregón se trabaja para incorporarlo como emblema junto con Roy, Oden y Aldridge. Quizá se esté aprendiendo de errores pasados. Es un equipo diseñado para llegar a la élite en dos años, dependiendo del impacto de Greg Oden, que tiene que recuperarse bien de su nueva lesión y perder no menos de cinco kilos. En Portland se tiene que lidiar con una previsible lucha de egos entre sus jóvenes figuras y en los despachos se debe conseguir un base de verdad, que sepa manejar el equipo. Sergio podría ocupar ese lugar, pero necesita confianza y minutos. Steve Blake es bueno, pero como suplente. Se coloca con corrección, reparte con eficacia y su tiro exterior es más que aceptable, pero carece de ese plus necesario para hacer de su equipo un contendiente real. McMillan prueba constantemente hasta probarse a sí mismo. Prueba con Roy subiendo el balón, con Sergio, con Blake e incluso Rudy es aspirante a ser el repartidor de juego. Mientras tanto, McMillan seguirá probando. De entrada, el escolta español se ha ganado su tiempo en cancha a base de sus canastas y sobre todo, por los intangibles del juego. Roba el balón, defiende y rebotea. Si Petrovic hubiera trabajado esos aspectos, quizá no hubiese tenido que esperar a desembarcar en New Jersey para que se corease su nombre en la grada. Pero él era un genio, y de ésos hay pocos.

viernes, 31 de octubre de 2008

La saga continúa


Es un "rookie" pero sólo a medias. Marc Gasol sigue los pasos de su hermano en el lugar en el que comenzó todo. El escaso entusiasmo de la ciudad de Memphis por su descuartizado equipo de baloncesto profesional no será un obstáculo para que Marc desarrolle una sólida carrera en la NBA. En una liga en la que los "siete pies" de nivel medio/alto escasean, es de esperar que se haga un hueco preferencial. De momento su debut ha sido prometedor. Con una mayor confianza a buen seguro que desplegará el juego eficaz que le consagró en la élite del baloncesto europeo. Marc ha dicho que sabe "más que la mayoría". Y tanto. Jugadores altos que han pasado sin pena ni gloria por la ACB o por la Lega han engrosado un puñado de buenos dólares en sus cuentas haciendo bulto en el banquillo junto al aguador. Así son las cosas. Una liga que no acoge como se merece a Juan Carlos Navarro es capaz de convertir en millonario a Mark Madsen o a DJ Mbenga, con tremenda capacidad atlética y una dudosa capacidad para ver aro.

De momento no será capaz de llevar a los Grizzlies a un récord positivo de victorias, pero amasará una gran cantidad de minutos que le servirán de gran ayuda para poner en marcha todo el talento que atesora. Es demasiado pronto para hacer pronósticos, aunque honestamente con el nivel actual no creo que los chicos de Iavaroni superen las 14 victorias.

miércoles, 29 de octubre de 2008

Comenzamos...

La temporada 2008-2009 ha arrancado en la cancha de los vigentes campeones. El Garden de Boston acogió el encuentro inaugural entre los Celtics y los Cavaliers. El transcurso de la competición nos mostrará si puede ser la final de la Conferencia Este, aunque a priori los de Cleveland han diseñado un equipo aspirante más del gusto de su estrella Lebron James . Los "verdes" son un año más viejos, y está por ver si sus rutilantes figuras vencen la dureza de la competición y los escuderos del banquillo dan un paso al frente.

En cuanto al resto de la jornada, hemos visto el debut de Rudy Fernández en la NBA. Brillante. Si el balear es capaz de ganarse la confianza del inexpresivo McMillan, puede que se convierta en el segundo tirador del equipo. La trayectoria de Brandon Roy le obliga a llevar el peso del equipo, y un experimentado Rudy le servirá de apoyo para guiar a los "tiernos" Blazers rumbo al Playoff. Quiero que transcurra al menos una semana para hablar en profundidad de Sergio Rodríguez . Él mismo me confesaba que se quería ir, y la renovación me ha pillado sinceramente a contrapié. ¿Traspaso a dos meses vista? Veremos...

En los Lakers la dinámica es la misma que la temporada anterior, con momentos de juego combinativo espectacular y minutos de "caraja" preocupante. Al menos es de esperar que con la adición de Andy Bynum en el puesto de pívot, el juego en el poste y los tiros de 4 metros de Pau aumenten su cotización de cara al All-Star.

La atención mediática se ha centrado también en el número 1 del Draft. Derrick Rose se ha estrenado con los grandes sin sobresaltos, con un partido en casa ante un rival débil. Los Bucks buscan la salida a su travesía por el desierto.

http://www.youtube.com/watch?v=g5NcRsam7SQ