La noticia es la "europeización" del equipo. El turco Ersan Ilyasova entendió que su etapa de acumulación de experiencia de alto nivel en el viejo continente había tocado a su fin y retorna al equipo que le brindó la opotunidad de pasearse muy jovencito por las canchas de la NBA. No ha sido un jugador tan determinante en el F.C.Barcelona, donde la inestabilidad en el banquillo primero y un cierto caos e indefinció en su papel en el equipo le perjudicó sensiblemente. Sinceramente yo esperaba más de un Ilyasova que había dejado destellos de alero más que aprovechable en su debut profesional.
En Milwaukee le espera Carlos Delfino, que aunque es argentino de cuna, se puede decir que terminó de curtirse en la Lega. La última experiencia de Delfino en Rusia no ha sido especialmente prolífica en cuanto a nivel baloncestístico (su cuenta bancaria sí lo ha notado). El argentino entrará en la rotación junto a Charlie Bell, al que su brillante estancia en Lugo le proporcionó la oportunidad de jugar en su país. Se acuerdan mucho en Galicia del buen hacer de Bell.
Para el puesto de base se han hecho con el croata Ukic, que no ha sabido ganarse la confianza de los entrenadores en Toronto. Será la extensión en la pista de las ideas de Scott Skiles, que precisamente colgó las zapatillas en Grecia. ¿Será por eso que haya buscado en Europa lo que no encuentra en la NBA?
Ukic competirá con el joven Brandon Jennings, que emigró a Italia para evitar el "duro trance" de jugar un año en cualquier Universidad y entrar en el draft de este año con minutos en una liga competitiva.
A todo ésto sumamos a un viejo conocido de nuestra liga como el holandés Francisco Elson. Este fornido mocetón logró explotar su capacidad atlética para conseguir un buen contrato. Todavía en Barcelona, Valencia o Sevilla se preguntan qué vieron a este chico en San Antonio. El caso es que ha hecho carrera, mejor para él. Elson compite por un puesto interior con su compatriota Dan Gadzuric, que cultivó sus habilidades para el baloncesto en la prestigiosa UCLA.
Si el "coach" Skiles tiene pasado europeo, podemos decir lo mismo de su cuadro técnico. El sobrevalorado Joe Wolf se dedicó a tapear por León una temporada y Jim Boylan jugó en Suecia y entrenó en Suiza en los felices años 80.
Esta mirada a Europa puede obedecer a un concepto romántico del baloncesto o simplemente, que resulta más barato y accesible hacerse con jugadores de perfil medio en nuestro basket. No todos tienen cláusulas abusivas que les impidan hacer las maletas rumbo a la NBA.